Pajares, destino perfecto
Si buscas alejarte de la ciudad, Pajares es el destino perfecto tanto si vienes con familia o amigos. ¡Descubre por qué!
Si buscas alejarte de la ciudad, Pajares es el destino perfecto tanto si vienes con familia o amigos. Situado en la carretera de Brihuega a Sacedon, Pajares es una pequeña pedanía que cuenta con siete habitantes (INE 2016), lleno de paz, tranquilidad, y naturaleza.
Pajares es un pueblo pequeño, pero lleno de cultura. Su iglesia parroquial es del siglo XXI, pero conserva las ruinas de una antigua ermita a la entrada del pueblo, junto a un lagar, del siglo pasado, en ruinas por la guerra civil. También, puedes encontrar dos antiguos lavaderos que se han conservado, a pesar de ya no estar en uso. Sin embargo, lo que realmente caracteriza al pueblo son las cuevas situadas en la cima, convertidas en bodegas particulares por los habitantes del pueblo. Estas cuevas no son solo de origen árabe, sino que funcionaron como túneles en la mismísima Guerra Civil.
Pero la verdadera belleza de este pequeño paraíso es la naturaleza que lo envuelve. Este situado en el hondo de un valle creado por el rio Pajares, afluente del río Tajuña. Alrededor del pequeño pueblo hay varios campos de cultivo y montañas llenas de vida. En buenas épocas, se pueden ver algún que otro venado, conejo, perdiz, o incluso jabalí. Además, dispone de varios senderos entre montañas o el mismo rio para pasear disfrutando de la naturaleza.
La época perfecta para ir es entre primavera y verano, ya que estarán los campos floridos y las montañas llenas de verde. Además, si espera al final de agosto, podrá disfrutar de las fiestas patronales del pueblo, celebradas el último fin de semana.
